Oración a santa Ocaña (y dos)

                                                                      Foto de Colita


Santa ocaña del cielo libertario/ mándanos una lluvia de abanicos/ que alivien los sofocos/ Y a los otros/ les ponga la yugular en duda y ascuas.

Guarécenos en los gasas de tus manos / y enséñanos a usar lo que tenemos / antes de que en la mesa camilla/ De la tele, suplamos los deseos.

Que los topos de tus trajes de reinona/ caigan como piedras y se cuelen/ en la grietas de esta España que da asquito/ a la que tu plantaste cara y pito/ convirtiendo el negro en primavera.

Que tus cejas de leer en todas partes/ sean nuestros arcos de victoria/ el día que miremos al vecino / con los ojos de mirar a nuestros hijos.

Que tu cuerpo y tu alma sean uno e indisoluble/ así darás alegría hasta al clásico / Platón y su sueño/ Y en la calle / tu estela y el sueño de alcanzarte.

Santa ocaña de Ramblas y floristas / que los hámsteres afilen sus colmillos / y venga la razón de jesucristo/ la que cuando niños nos contaban / la del jipi / que se lo hizo contigo.

A currar cada día con tus soles / ardiendo entre la coherencia y los sentidos/ santa ocaña no nos dejes solos / aunque si no lo hiciste en los ochenta / es probable que ocurran los milagros/ santa ocaña que moriste y nos mataste / mándanos un poco de vidilla / Por tu boca los gritos de vehemencia / extienden, en un soplo, la alegría.

No hay comentarios: