VIVIANNE VIVES

Estoy emocionada. Esto del facebook, cuando se utiliza a determinada edad, debería llamarse "No todo tu pasado se lo llevaron los amigos muertos por mucho que algunas veces sucumbas a esta idea, por otra parte real."
Vivianne Vives es actriz, directora de cine, fotógrafa y que sé yo cuantas cosas más, aunque hoy sea lo de menos.
Lo de más es que la he reencontrado y me he emocionado. Ha sido un reencuentro vía asteroide internauta y después de tantos, tantísimos años sin sabernos, lo primero que me ha preguntado ( siempre por escrito) ha sido: ¿Vives en Igualada?.
Habrá fisgoneado entre "mis amigos del café cibernético y habrá visto multitud de igualadinos reencontrados ( Igualada; el lugar donde dejé la magdalena de Proust de mi infancia, no la Magda Maragda, que soy yo) Lo siguiente que me ha dicho ( escrito) ha sido: "Respóndeme y te envío un poema".
Teníamos poco más de veinte años y ándabamos por las calles como si las calles fueran nuestras, como si Barcelona se abriera a nuestros pies cuando la queríamos secreta y volara por encima del Tibidabo envuelta en nuestras quimeras, cuando la abríamos a los sueños.
Vivianne me descubrió los cuentos de la gran Dikinsen y a detectar los muchachos que habían estudiado en los Jesuitas, casi siempre locos por el jazz.
Por entonces ella era la mujer de un hombre maduro, de Enric Sió, el padrino, el mío, que se fué de este mundo dejando el placer de vivir en sus recuerdos. Vivianne era la Lolita de Nabokov de Enric, una Lolita consumada. Enric la amaba con locura.
Yo andaba con Màgi y también nos ámabamos con locura, tanto, que no dudo en decir que ha sido el hombre que más he amado en este mundo. Y no fué su muerte lo que le valió este puesto en mi corazón. Toda la vida que estuvimos juntos, lo supimos los dos. Desde muy adentro lo supimos desde niños.
Y Vivianne, siempre tan fashion ( no se usaba el término, pero lo era) desconcertante, juguetona, apasionada, brillante, decidida, con la que destilé agua de la buena para mojar las aceras de las calle, cuando era verano y necesitábamos un poco de lluvia, para bien deslizar las zapatillas sobre el asfalto.
La última vez que la ví fué en el Ampurdán, donde rodaba "Lo más natural", una peli de Josefina Molina, junto a Bosé y Charo López. Con esta última andaba picada, escorpionas las dos, chulas como un ocho, aunque de buen seguro acabaron el rodaje entre abrazos. Fuí al rodaje con mi hija. Un bebé de siete meses que se meaba de risa con ella. Literalmente. Se desgañitaba. Ahí, en la cala de Begur, le ohí a Júlia lanzar sus primeras carcajadas. Hay fotos. Polaroids, para más señas. Tanto reían, que hasta Josefina Molina decidió que era mejor apartar al bebé del rodaje, presa la pequeña de un ataque de logolalia y risas entre la acción y las cámaras. Luego pasamos unos días en una casa de Tossa. Generosidad, charlas hasta ponerse el día. Vivianne en bruto, tan tierna como caprichosa...
Nunca la dejé marcharse aún no sabiendo nada o poco de ella... Hasta el día de hoy en el facebook. Y su lugar actual en el mundo: Austin, Texas. Y la muy descarada, tal cuál la quería, me manda un mensaje y me dice: "Increíble! ¿Vives en Igualada? Confírmamélo y te mando un poema."
O sea que sigue escribiendo poemas, -ya sean en inglés o en latín-, porque esto también me lo ha dejado claro: "English".
Siento que sigue siendo la misma con una vuelta de tuerca, ya sea dirigiendo cine o fotografíando ruedas de coches. La misma Vivianne, la misma Magda. Los chicos ya no están. A los chicos les gusta agruparse y hacer sus cosas juntos. Es un gregarismo masculino del todo absurdo que ni Enric ni Màgi compartían, pero algo he de decir para no constatar, sin lamentar, su ausencia. Vivianne Vives, ésta mujer que desde el gringo me devuelve parte de lo que fuí y soy. A las dos, "nos" deseo una feliz andadura, nunca interrumpida por otra otra parte ¿por qué qué es el tiempo en estos casos? ¿Flacidez en los músculos? No si sigue teniendo el mismo modo de calzarse el guante o de quitárselo y lanzarlo a los pies de un caballero mientras canta la Bethania y los chavales de los Jesuítas se enamoran del jazz y de sus piernas, cuando ella las cruza, recatada, pensando que tiene que hacer para seguir adelante.
Seguir adelante, Vivianne, y cumplir todos sus sueños.

3 comentarios:

Viviane Vives dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Viviane Vives dijo...

ay magda cariño, como me haces llorar.

LIBERTAD PERFECTA

Sexo perfecto, obra viva en el espejo; pensamiento límpido penetrando esta lección primera. Tercer encuentro.

Otro día, quizá otro año, es tiempo de caza, encrucijada sólo de aventura. La presa es ella, la de ojos claros y pelo oscuro natural, la piel blanca y los pechos llenos; la mujer del norte.

Alas negras de mi vestido de lino flotan sobre mi piel canela, marco de mis hombros y espalda perfectos.

Y el mundo es un coño caliente y yo buceo y sonrío con mi güisqui en la mano y mi divina cadencia.

Yo sólo quiero bailar y mirarla y sentirle a él, y a ella, mirándome;
¡Ahora!... soy la música, soy mi mirada y soy mi cuerpo; soy cazador y soy presa, soy mi complice y mi guardián... torbellino creándose a si mismo. Empieza el vuelo...

(Invitados sin rima: no existís. Funcionarios, obreros y secretarias; amas de casa, insensibles y cortos de aliento, imbéciles que gobiernan el mundo y las casas de las personas... no existís.
Porque soy demasiado joven, demasiado inocente y, sobre todo, demasiado atrevida.)

Mi baile negro de lino y mi güisqui y mi sonrisa y mi mirada y su mirada sobre mi. Ella arde y también mira, de reojo. El avanza radiante entre la gente como un gato.

Cada palabra que oigo es perfecta, cada gesto armonioso. El suelo se desliza bajo mis pies, el mundo conquista la realidad bajo mi mando.

No me doy cuenta pero en un par de pecados más viviré la fusión de existencias y ésto es sólo un preludio. Por el momento, danzo en sincronía este ahora perfecto.

¡Ay! presencia total. Penosa inocencia... predestinada.
¡Ay! si lo hubiera sabido... Persona tras persona, año tras año, sexo tras sexo; tantas veces me encuentro buscando mis alas negras de libertad...

Anónimo dijo...

eutanasia activa

la clavelitos