Los días: trabajo para Reyes Torío.

Hoy era el día ( escribo el post a las 21.00) de la Salud y la Seguridad en el Trabajo. ¿Alquién se ha enterado? Los colegas sindicalistas y los que han visto el Telediario en el minuto uno, tal vez sí, porqué acostumbran a decirlo. No sigo este santoral laico de nuestros días. Según he sabido se agrupan por días Mundiales, Internacionales y así hasta llegar al día en que me quieras. Entiendo que los días dedicados a enfermedades, sirven para alguna cosa. Tomas de conciencia, rasgaduras en el manto de la conciencia, pesetillas p´al Domund del día... Seguro que sirven. Todo esto me ha sobrevenido, otra vez, esperando el autobús. La cosa tiene su enjundia y cada cual que saque su propia conclusión. ¿Cuantos somos los que tenemos la durada de nuestro mejor tiempo de regocijo y meditación, al albur de las idas y venidas de los transportes metropolitanos? Pero es otra película... Esperaba el autobús, he mirado hacía arriba y he visto dos banderolas asidas a una farola que publicitaban el "día del emprenedor". El día del emprendedor. Hay cosas que no es necesario traducir. No sé si es un día Internacional, Mundial o local. Lo que tengo claro es que en mi casa no se ha celebrado nunca. Y no es que les tenga tirria a los emprendedores. Yo misma lo soy, lo he sido y lo seré. Pero no de los de la publicidad. A partir de aquí, y muy gratamente, cómo si de un ejercicio zen se tratara, la cabeza se me ha ido detrás de los días Internacionales y Mundiales que echo de menos, en el bienentendido que tengamos que cambiar el día de San Judas Tadeo, Santa Tecla o el día en que nos conocimos, por días globalizados. Y he pensado que porqué no está el día de los tarambanas, ni el día de la melancolía, ni el día del rocanrol. Ni el día descarriado, el día al revés y todos esos días que tienen su historia en todas las historias interesantes. No me he pasado de parada, las elucubraciones cotidianas no dan para tanto. El Día, el supermercado Día, tiene su propia hora de cierre y el día de mañana siempre llega. Vaya si llega, con sus facturas, sus vencimientos y todas estas liturgias del capitalismo de base, que se niega a que le llegue el día de su muerte. Abogo, pues, a las naciones unidas o a la gente que trabaja ( lujazo, tú) en escribir el día de tal y de pascual en el calendario, a que tengan en cuentan las noches de según que días y los días para todos. Reyes Torío, la presidenta del disco, se encargará de la tarea. Nunca falla a la hora de dar color a la peña. ¿Montamos el día de vaya noche la de aquél día? Voy a maquearme. Hoy salgo a cenar. Espero que esta noche, de vuelta a casa, a la mía o la de alguien, pueda sentir aquellas ganas de detener el tiempo, de reloj no marques las horas porqué voy a enloquecer... Y si no, otro día. Que mañana sea un buen día para todos.

1 comentario:

la víbora dijo...

me apunto al día del rocanrol.