Ejercicio de estilo

Obra de Santi Moix

La mejor forma de lavar el corazón es ponerlo a charlar. Agua para las axilas y palabras para el alma. Hay veces que las cosas que una hace, parecen muy grandiosas y llenas de mugre, o muy lustrosas y llenas de grandeza. Para contar grandezas basta con la delicadeza. El entusiasmo sólo sirve si lo que vas a contar entre brincos, lo ha de tomar en sus manos un corazón amigo. Para contar las miserias, el balbuceo que las victimiza, ha de tornarse sílaba fuerte, aunque para ello sea preciso volver a aprender a hablar un nuevo idioma.
Y todo eso no es posible si no hay nadie a quien irle con la murga.
Aún así, a pesar de darte y darte y mostrarte toda, si tantas veces una misma no se aguanta ¿Cómo no va a chirriar, siempre, de alguien, alguna cosa? Las relaciones humanas ( y dale perico al torno; estos últimos días vivo para afuera) no son fáciles, pero tampoco tan difíciles como nos pretenden hacer creer. Para bien amar ( digo lo que siento y lo que creo haber aprendido. No siento, ni "siento" cátedra) hay que amar lo que chirría. Os parecerá una bobada como de virgen que se aparece, pero lo que mas amo de la gente a la que amo, es aquello que me chirría de ésta gente.
O no es lo que mas amo, porque me jode, pero sí que es lo que me produce mas ternura. Quizás por eso (que puede parecer una perversión, si lo miras con el cristal del Yo estoy bien si Tú estás bien y casi todos los libros de estilo de la terapias psicológicas modernas, en las que se pretende un YO inmaculado y rechoncho, tan alto como la luna, para poder hacerte feliz a TI) sólo una vez en mi larga vida he tenido el privilegio de ser amada y amar ( hablo del amor erótico) y, de momento este es un privilegio, que visto lo visto, no he vuelto a merecer.
Al hombre de los ojos mas bellos del mundo, también le daba ternura mi torpeza. Se fue. El próximo sábado cumpliría años.
La amistad es la misma cosa, sólo que con los amigos, -al no medirte la distancia que va del ombligo al placer que lleva a la vida; al placer que lleva a la muerte mas sublime-, parece otra cosa aunque sea la misma, porque, con ellos y ellas, también, pongo a crecer la ternura en la carencia.
Los hay que no lo soportan y en cuanto te vas a fregar los platos te quitan el suelo de debajo de los pies. Una traición amiga, una traición de lealtad, duele tanto como la del amor erótico, sólo que al no contar con la distancia que va del ombligo al placer, -que lleva a la vida y que lleva a la muerte sublime-, se puede girar página con rapidez. No hay que dignificarse, ni hacerse polvo, ni volver a enderezarse. No es en vano que el cancionero no tenga canciones sobre las deslealtades amigas y sí sobre las eróticas.
Para una deslealtad amiga basta una palabra soez y frotarse las manos con un trapo de cocina, aunque el dolor o la rabia te emponzoñen la boca del estómago. Para la deslealtad erótica, hace falta un cancionero entero y poner una misma canción hasta la hartura.

II

La perra ha venido a lamerme lo dedos de los pies, porque al escribir del tirón, con una pierna debajo de la otra, sentada encima de una silla, se me ha caído la zapatilla al suelo. La perra me ha cortado el rollo. No voy a volver sobre lo escrito, No pienso ni volver a leerlo, Perdonad la osadía. Siento que todo cuanto he escrito del tirón me ha salido del corazón, que rima con tostón. Llamemósle ejercicio de estilo, que es muy cool, muy Vila-Matas. A ver cómo resiste la sinceridad sin corrector a la luz del día...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Apasionante. Magda, día a día, si es que això es possible, m´agraden més els teus posts.

Quina manera d´escriure, directe desde el cor però tan tan ben feta.

Andebe, que bien tan hesho!!!! Y te has hecho.

Un petó, rockera.

Àngels P.

Anónimo dijo...

Envejo la teva passió. Estàs igual ara que aunt eret´s petita. Jo he volgut una vida més estable.

M. la teva amiga adolescent

Jesús Garrido dijo...

excelente, que buenos dibujos

EL CALLEJON DEL HAMBRE dijo...

Joe Madga me has dao en todo el centro.
Asi estuve yo, atravesando desiertos llenos de canciones. Y hoy tantos años después, me he visto reflejado, chirridos incluidos.