Antes de... y regalo de la bio de Pau Riba


                                                         Pau Riba  fotografiado por Cristian Casanelles



Ya van siendo muchos los creadores jubilados que han tenido que vérselas con la ley (en justicia no nombro la palabra justicia para tan infames casos) porque en sus cuentas corrientes, que no atléticas, muy de vez en cuando les entra una pasta bajo el sospechoso nombre de derechos de autor, que no dejan de ser unos seres chiquitos que se meten en la cuenta con la misma intensidad con la que Miguel Hernández se daba a los hospitales y para la libertad, solo que estos seres están muy añorados de los que colegas que se quedan fuera, que son muchos y de tan incierto destino como arbitraria es la disponibilidad de muchos para ponerlos a existir. En el terreno literario, esto le ha pasado (nombro al que a mi me parece mas lustroso) al poeta Antonio Gamoneda. En el año 96 le dieron el Cervantes y hace poco la comunión con ruedas de molino. Parece ser que ya se está haciendo un proyecto de ley para zanjar el tema, pero eso es largo,- los proyectos siempre lo son-, y, mientras tanto, la ley ejecutora seguirá congelando pensiones de señoras y señores que cobran cosas de trabajos que realizan estando jubilados y vaya usted a saber qué oscura razón o ansiedad ocultan en su obstinación para seguir currando con lo bien que se está dando de comer a las ocas del parque, desobedeciendo por un momento a la autoridad que suplica que no le des margaritas a los cerdos, en los descansos entre ir a por pan y ejercer el noble deporte de la petanca. O que terquedad en seguir cobrando lo que en su día crearon y todavía se vende, pudiendo darlo a tanta institución privada que hace lo que le correspondería hacer el gobierno.
O sea que si tu tienes una pensión y encima eres músico, pintor, fotógrafo o escritor, vete mirando el edificio de la Seguridad Social que te corresponde porque ahí habrás de pesar bastantes horas. No es coña. Las cosas están así en este país de mierda que ejerce este tipo de terrorismo cultural. Y en lo de terrorismo si que cito, literal, a Gamoneda, que evita hablar de país y de una mierda  a la que yo obligo a abandonar el concepto escatológico para que entre de lleno en el de la locura, que es donde nos llevan. Y como tanta desproporción embota los sentidos, no se me ocurre mejor cosa, desde mi rincón, que ofrecer a los “ ofrecibles”, regalar a los “regalables” uno de mis libros, en este caso una biografía de Pau Riba, el hombre que vino a romper moldes desde una Catalunya que todavía no es capaz de  aclamarlo y distinguirlo como poeta, analista y cantante, porque aún sigue cosida a la bochornosa moral del ni “poc ni massa ni gens”, entre otras cosas. Una biografía de Pau Riba, el rey del rock catalán. Sobre el libro nunca recibí mas derechos que los de pataleta y pocas pesetas. Está escrito  en el noventa y tres, de modo que la situación vital del creador con cuenta corriente y espía avizor, no era la actual. Han pasado muchas cosas y muchos años, pero el documento sirve. Si os gusta el librito y os saca al menos un par de sonrisas y podéis ( el puede el quiere el tiene y el debe se fueron de paseo tralará) pagad lo que consideréis a través de Pay Pal o de la cuenta corriente (no atlética) cuyo número se ve reflejado a la derecha de la página del blog según se lee. El trabajo está redactado en catalán, de modo que también es una buena manera para los que no lo habláis, de tratar de leerlo y así quizás os daréis cuenta de que no es tan difícilmente entendible si se tiene como base la lengua castellana. De un solo disparo, con una sola bala, me solidarizo con la jubilación de los creadores, con la mía propia, me regalo antes de que me subasten y se queden con la pasta, contribuyo a dar vuelo a mi lengua materna y doy a conocer alguna cosa sobre el hombre que a mi me abrió camino, intelectualmente hablando, en el mundo de la creación y en el de la amistad, casi nada. 
Si queréis saber algo mas sobre este creador inabarcable, os podéis bajar este archivo 


1 comentario:

Anónimo dijo...

Compré hace una semana el libro en "Todocolección". Aún no lo he leído. Pau Riba es uno de los más grandes (si no el más grande) creadores de este país. Lo triste es que no sólo está descatalogado tu libro, ahora mismo "Dioptria" -que se reeditó en 2006- también lo está y es inencontrable. En mi opinión "Jo, la donya i el gripau" es uno de los discos más extraordinarios de la historia del rock de cualquier nacionalidad. Pero Pau Riba no vive sólo de su pasado, su reciente "Mosques de colors" es también una maravilla.
Escribo desde Madrid.