Bajar las escaleras como locos








Ayer vinieron a casa mi hija y su hermano e hijo mio putativo adoptivo. Ya tienen veintiún añazos!, pero como hacía tiempo que no les veía juntos, escribí lo que sigue, mientras dejaba de hacer una de las tareas domésticas que mas odio del mundo: planchar.



Siguen bajando las escaleras como locos; sienten que les esperan muchas cosas.
Hace años que el jardín se quedó corto, con los perros, los jabalíes y sus cabañas.
Al fondo, Barcelona diminuta parecía un poster hecho a medida en que perderse a pensar antes del sueño.
Ya no fingen el dolor ni la caída. Ahora piden el abrazo como adultos. No se andan con chiquitas: Desparpajo.
La delicadeza es un traje hecho a medida, que cosen entre el amor y los paisajes. Que no vuelvan nunca las oscuras golondrinas.
Ella sigue pareciendo una filósofa del biberón muy responsable y él un delincuente de azúcar con discurso y despistado ¿Quién forjará las formas tan temprano? ¿Quién ha roto el cristal con la pelota.
"No diremos ni mú: Muerte al chivato." "Y si me meo, mamá, no te me enfades, piensa que es Fanta que se me ha vertido encima."
Siguen bajando las escaleras como locos y no es por llegar tarde a ningún sitio.
Tanta prisa denota que a los niños, no se les deja. Ni se debe dejarlos así, tan fácilmente.
Compartieron todo, "el gomito" , el cole y las literas. A ver quién es el chulo que se atreve a poner en entredicho estos lazos.
Caín y Abel dejaron su legado.
Verles juntos me da vida y me da risa. Por cada noche de tos achucharía aquellos mofletes,-piel de ángel sonrosados-, que hoy dan a besar a otras bocas.
Morder ya no es saciar el hambre de la tripa.
Pero siguen bajando las escaleras como locos. En la calle abren los brazos como astas de molino y se agarran muy fuerte por el monstruo.
Otras veces se desploman como viejos. Los dos, cada uno con la mano en la barbilla, como cuando urdían con qué poder joder a los vecinos.
A los pájaros sólo se les puede desear un alto vuelo. Que su afán de libertad de un soplo a la utopía. Imposible si o no. Y necesaria, como lo fue caer rendidos cada noche y acostarse con un eclipse de leche en la barbilla.



(La rima es burda, pero me contiene de no escribir tomos enciclopédicos y perderme en los detalles. Rizar el rizo.)

1 comentario:

arqui dijo...

Magda me ha gustado mucho este post. Me ha gustado mucho leer algo emotivo, olvidarme de la crisis, de las guerras, del cólera, de la tiranía del mercado, recordar y reflexionar lo importante y gratificante que es disfrutar de los hijos. Me ha gustado mucho leer a una madre satisfecha con la educación de sus hijos, me ha gustado mucho este soplo alegre de fraternidad y de educación en y para la libertad. Un gusto leerte.